Diferencia entre piedras preciosas y semipreciosas | Joyerías Bizzarro

Aproximadamente hace siete mil años el hombre empezó a conocer las gemas. Las primeras en incorporarse a su vida fueron la amatista, el ámbar, el granate, el jade, el lapislázuli, la esmeralda y la turquesa, pero no fue hasta el siglo XIX en que surgió una división entre piedras preciosas y semipreciosas.

Diamante, esmeralda, rubí y zafiro: estas son las denominadas piedras preciosas y adoptan este mote por su hermosura, colores, brillo y... ...popularidad, sí, la fama es la única diferencia entre estas piedras y el resto de materiales utilizados en joyería.

Entendamos que las gemas pueden proceder de una base mineral (todas las piedras con algún color o brillo) u orgánica (perlas o ámbar). Cualquiera que sea su procedencia, se consideran valiosas por su belleza, durabilidad y escasez relativa.

Sin embargo, en el año 2004 el ópalo Aurora Australis fue adquirido por un millón de dólares, más de $5,500 dólares por quilate. Por otro lado, gemas extraídas de un berilo rojo alcanzaron el precio de $10,000 dólares por quilate. Estas gemas, y algunas otras, han costado mucho más que muchas piedras preciosas y son un claro ejemplo de que las denominadas “semipreciosas” también pueden tener un valor verdaderamente extraordinario.

Entonces, ahora que sabes que el valor de alguna gema lo determina su belleza o extrañeza por encima de algún mote otorgado por el marketing, la pregunta es ¿por qué nos gustan tanto?

Los seres humanos tenemos un extraño gusto por todo aquello que brilla, para prueba de ello, un equipo de investigadores belgas realizó estudios publicados en el Journal of Consumer Psychology donde quedó demostrado que este gusto tiene un origen primitivo relacionado con el agua. Es decir que nuestro sentido de supervivencia sabe que lo más valioso en la existencia, en realidad es el agua, por encima de todas las cosas, pues es el fundamento de la vida.

Por otra parte, en un estudio realizado por la Universidad de Houston se observó que los niños pequeños se llevaban a la boca objetos brillantes mucho más que objetos opacos, pero todo esto es tema que da para otro blog, por lo pronto aprovechemos este gusto por lo brillante con las colecciones que BIZZARRO tiene para ti.