La metáfora es clara, las esmeraldas necesitan el calor del agua para formar dicha piedra preciosa; por otra parte, el amor requiere el calor de la sangre de nuestros corazones para formar un sentimiento equilibrado y profundo.  

Ya lo decía el poeta uruguayo Mario Benedetti en su pieza “Por siempre”: "Si la esmeraldas  se opacara, si el oro perdiera su color, entonces, se acabaría nuestro amor", haciendo referencia a la imposibilidad de quebrantar un lazo sentimental tan fuerte.  

 La declaración de amor puede llegar a ser un evento difícil de expresar con palabras, que pone los nervios de punta, pero cuando el sentimiento fluye, no importa qué tan nervioso te encuentres, estas gemas  estarán ahí para sellar esa promesa.  

 Se dice que esta piedra muy utilizada en la joyería combina con parejas equilibradas, con una conexión mucho más allá que la física pues el bienestar es una de las propiedades que se le atribuye a este cristal, no por nada es representativo del aniversario de bodas número 55 para amores con un largo recorrido que celebran la conexión de dos individuos en un solo ente, con virtudes y defectos construyendo una pareja armoniosa.  

 Finalmente te dejamos este romántico poema al amor verdadero, del maestro Mario Benedetti que puedes utilizar como parte de un regalo para engalanarlo:  

Por siempre

Si la esmeralda se opacara,
si el oro perdiera su color,
entonces, se acabaría
nuestro amor.

Si el sol no calentara,
si la luna no existiera,
entonces, no tendría
sentido vivir en esta tierra
como tampoco tendría sentido
vivir sin mi vida,
la mujer de mis sueños,
la que me da la alegría...

Si el mundo no girara
o el tiempo no existiese,
entonces, jamás moriría
Jamás morirías
tampoco nuestro amor...
pero el tiempo no es necesario
nuestro amor es eterno
no necesitamos del sol
de la luna o los astros
para seguir amándonos...

Si la vida fuera otra
y la muerte llegase
entonces, te amaría
hoy, mañana...
por siempre...
todavía.

Mario Benedetti