Si estás a punto de dar el gran paso y quieres hacerlo de una manera creativa pero no sabes cómo, aquí te damos algunas ideas que le han funcionado a otras personas para conseguir el “sí” y que te pueden servir a ti como inspiración.
Si tu pareja ama los libros, puedes sorprenderla de la siguiente manera: compras un ejemplar que sabes que le gustará, recortas varias hojas del libro para hacer un hueco en forma de círculo –o corazón si quieres verte más romántico- y dentro colocas el anillo. En la hoja previa de donde comience el recorte puedes escribir la pregunta de si quiere casarse contigo. Cuando diga que sí, pídele que pase la hoja y entonces descubrirá el anillo de compromiso. Dale la sorpresa después de una reunión con familiares o amigos o, si son más reservados, en una cena para dos.
Una declaración en la playa siempre es romántica, pero si preparas lo siguiente con anticipación se volverá inolvidable: pide ayuda para escribir la propuesta en la playa y dibujar corazones o lo que te parezca adecuado. Tanto las letras como los dibujos deben ser de gran tamaño porque la idea es que busques una playa más o menos solitaria que se pueda ver desde un peñasco. Llevas a tu persona amada a las alturas y le muestras la sorpresa. Le fascinará esta declaración.
Una manera divertida y en la que la persona que reciba el anillo participante de manera activa, es organizarle un rally. Piensa en acertijos que tengan que ver con ustedes y su historia y cada que resuelva uno ganará una pieza de rompecabezas. Al tener todas las piezas, estará lista para unirlas y cuando termine podrá leer tu propuesta de matrimonio en las piezas unidas que, para no perder el toque romántico, pueden formar un corazón. Ese es el momento en que le darás el premio mayor: su anillo de compromiso.
Otra idea interesante es sorprender a tu amada pareja en el cine. Para ello requieres la ayuda de sus amistades para que lleven a tu pareja sin que sospeche nada y antes de que comience la película, entre los comerciales, debes transmitir un video donde aparezcas tú o fotos de la historia de su relación o, incluso, un pequeño corto donde seas el protagonista. El límite es tu imaginación y creatividad. Al finalizar el video, aparecerás en la sala para declararte frente a todos los espectadores.
Si eres persistente y disciplinado, puedes hacer un video a lo largo del año, en diversos lugares y situaciones, donde cada día le pidas que se case contigo. Al final tendrás un video donde saldrás los 365 días pidiéndole matrimonio. Organiza una situación especial para que vea el video y al final estarás tú con tu anillo de compromiso y una cautivadora sonrisa para declarártele.
Para esta propuesta necesitas una pared en la calle por donde tu pareja pase frecuentemente. Debes tener autorización para modificarla y desplegar tus dotes artísticos ahí, ya que deberás decorarla y pintarla como más te guste, haciendo un hermoso fondo en el que destaca la pregunta donde le pides matrimonio. Después, vuelve el momento más romántico con una rodilla en el suelo y el anillo de compromiso ante sus ojos.
Invita a tu pareja a ver películas con algún motivo común para que no sospeche nada. Cuando llegue recíbela con un ambiente romántico: velas, pétalos de rosas, inciensos, lo que se te ocurra o sepas que le gusta. Con letreros guíala hasta el extremo de un hilo de estambre estratégicamente colocado e indícale que lo tome y lo vaya siguiendo. Mientras va haciendo el recorrido y por los lugares que va pasando coloca más carteles con frases que le quieras decir. Al final del hilo debes amarrar un cartel donde le pides matrimonio y guardarlo dentro de un cajón. Para que tu pareja pueda acceder a él, debe jalarlo o sacarlo. En ese momento descubrirá la propuesta llena de emoción. Cuando diga que sí, será el momento ideal para colocar el anillo de compromiso en su dedo. Puedes hacerlo en privado o invitar amigos y familiares para que la reciban contigo y sean testigos de ese momento tan especial.
Si tienes talento para el canto, esta es una idea genial, pero no puedes hacerla tú solo, requerirás cómplices que también tengan aptitudes musicales. Cita a tu persona amada en un parque o en un lugar que sea especial para ustedes. Cuando llegue, uno de los cómplices la recibirá entonando las primeras líneas de una canción escrita por ti donde le digas todo lo que sientes por ella y por qué quieres pasar el resto de tu vida a su lado. Los párrafos de la canción deberán ser entonados por varios cómplices que la irán guiando, uno tras otro, alrededor del lugar hasta que llegue a donde te encuentras tú. En ese momento te toca desplegar tu talento artístico y finalizar la canción con la propuesta de matrimonio y la entrega del anillo. No podrá decir que no.
No se trata de una cena para dos. Tu pareja debe ir a comer con sus amistades y tú la sorprenderás desde lejos, a través de una ventana o puerta, pasándole varios carteles que sostendrás en tus manos con un mensaje de amor acompañado de imágenes que ilustren tus frases. La última será en la que le preguntes si desea casarse contigo. Al final, entrégale unas flores y un hermoso anillo de compromiso de la manera tradicional: con una rodilla en el suelo.
Estas son algunas ideas que te pueden servir como inspiración para crear la tuya. El secreto es que las personalices de acuerdo con sus gustos y circunstancias. No tienen que ser caras o lujosas, simplemente piensa en lo que a tu pareja le puede sorprender y gustar. Finalmente recuerda: la mejor propuesta es la que se hace desde el corazón. Hazla inolvidable.